viernes, 30 de marzo de 2018

Trabajar desde casa también es trabajar

Trabajar desde casa en China no es normal. Aquí, "estar en la oficina" significa "trabajar", aunque he visto demasiadas veces gente que se pasa horas y horas en la oficina rascándose la barriga. En mi trabajo anterior, cuando el jefe no estaba, se notaba. La gente se levantaba y se ponía de cháchara y se iban a la hora en punto, algo que no hacían nunca cuando el jefe estaba, ya que hay que hacer ver que estás muy ocupado siempre. De lo contrario, corres el riesgo de que alguien se dé cuenta de que la empresa podría sobrevivir perfectamente sin ti, o el jefe podría darte más cosas que hacer. (En esa oficina, cada vez que había una nueva tarea a repartir, la gente se peleaba por no hacerla, jajaja).

Cuando le digo a alguien que trabajo desde casa, algunos se imaginan que no hago nada en todo el día, o que me siento en el sofá y me pongo a ver la tele a media tarde. Supongo que, para algunos, trabajar sin que haya nadie vigilándote es algo inimaginable (sobre todo para un amigo que tiene su propia empresa. Pobre, vaya empleados debe tener...).
"Trabajar" desde casa.

El trabajo que yo hago se basa en proyectos con una fecha de entrega concreta y lo hago todo yo solita, ya que soy la única que traduce hacia el español. Es un trabajo para el que no hace falta estar en la oficina. Antes a veces teníamos alguna reunión y me llamaban por videoconferencia, pero ya ni eso.

Mucha gente se extraña cuando digo que no puedo quedar a las 11 de la mañana porque a esa hora tengo que trabajar. Aunque no esté en la oficina, enciendo el QQ (el messenger chino) y ahí están todos los de la oficina conectados. Si surge algo que hay que hacer rápidamente, me avisan por ahí. Y no es plan de que me escriban y yo conteste a las dos horas porque estaba paseando. Como no hay nadie "vigilándome", siento que tengo que demostrar que se puede confiar en mí y que estoy trabajando durante las horas que digo que estoy trabajando. A veces salgo a comer y se me pasa la hora, pero eso también lo hacen los que están en la oficina.

¿Trabajas desde casa? Seguro que curras un montón.

Pues sí, desde casa se es bastante productivo. No hay gente que se acerque a charlar contigo, no hay movimiento por todas partes distrayéndote, no hay ruidos, no hay reuniones que deberían haber sido un e-mail, no hay un armario lleno de guarrerías tentándote cada vez que te acercas a la cocina. ¡Anda que no engordé en la oficina de Shanghai! Con todas esas patatas fritas y pastelitos que yo en casa jamás tengo. Pero si me los ponen delante, no me puedo resistir. Si no fuera por el messenger, rendiría mucho más, pero tengo que seguir las conversaciones por si se dice algo importante. El año pasado trabajé un mes desde España y se notaba un montón cuando por mi tarde no había nadie conectado.

Aparte del ahorro en transporte, cuando trabajas desde casa también ahorras... ¡en ropa!


Yo no trabajo en pijama porque me ducho por la mañana y tal, pero me pongo ropa vieja de estar por casa. Bueno, y con esa misma ropa salgo a pasear a la perra... pero en China no importa.

4 comentarios:

  1. el último párrafo, escondido tras la foto... impagable. desde casa o en la oficina. impagable.

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    1. Tendría usted que verme por las mañanas sacando a la perra con un pijama de oso con orejas y todo.

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  2. Ya. Mi cuñada hace años que trabaja desde casa, y es una curranta total, no levanta cabeza.
    Yo tampoco gasto en ropa ya, jajaja, o en casa, o al monte!

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    1. Bueno, con la de ropa que te compraste en Shanghai tienes para 70 años, jajajaja.

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