martes, 9 de agosto de 2016

Los Juegos Olímpicos

Creo que este es el primer año que no he visto los Juegos Olímpicos en la tele. En China también los retransmiten, claro, pero no sé a qué hora, ni si tengo ese canal, ni nada. Hasta ahora, los Juegos Olímpicos siempre me pillaban de vacaciones en Chipiona y a la hora de la siesta siempre veía la gimnasia o algún otro deporte raro que solo sale en la tele una vez cada cuatro años.

En China, los Juegos ya han tenido la primera polémica con la pelea entre el nadador australiano y el chino. El nadador australiano dijo que el chino era un tramposo (dio positivo por dopping poco después de que un medicamento se añadiera a la lista de sustancias no permitidas) y China, como siempre, se lo ha tomado como una afrenta personal. Bueno, no China en general, sino la manada de gente que siempre se ofende por todo. Si normalmente en un país hay un 15% de imbéciles (por decir un número al azar), en China ese 15% es un número muy grande. Y claro, hacen mucho ruido y dejan mal a todo el mundo. Igual que hace unas semanas cuando el veredicto sobre unas islas del Mar de China Meridional dio la razón a Filipinas y muchos chinos se enfadaron, aguantaron la respiración hasta ponerse colorados y luego empezaron con pataletas de "no nos quitarán ni un pedacito", "vamos a anexionar Filipinas" y "vamos a boicotear Kentucky Fried Chicken porque seguro que los americanos tienen algo que ver en todo esto". En Hong Kong y Taiwan dicen que los chinos tienen el corazón de cristal y se les rompe muy fácilmente.

Bueno, ya me estoy yendo por las ramas. Yo quería hablar de la única vez que he visto unos Juegos en vivo y en directo: en Beijing 2008. No vi los Juegos de agosto sino los Paralímpicos de septiembre, porque durante ese verano de 2008 el gobierno hizo lo imposible por echar a todos los estudiantes de allí, denegando a quienes pedían alargar sus visados para poder quedarse. Pero en septiembre, cuando volvimos de las vacaciones, nos encontramos con que los tickets para los Juegos Paralímpicos prácticamente los regalaban: las entradas valían 50 yuanes, 5 euros en aquellos tiempos. No conseguimos entradas para la piscina, pero sí para el estadio del Nido. Y allá nos fuimos a pasar la tarde. Vimos carreras corriendo, carreras en silla de ruedas y no me acuerdo qué más. La cosa duró unas 4 horas y estuvo muy bien. A mí no me interesan especialmente las competiciones deportivas, pero estar allí era muy emocionante. Sobre todo cuando un chino ganaba la medalla de oro en una prueba y 90.000 chinos se ponían de pie a cantar el himno nacional. (Cuando ganaba un extranjero y sonaba el himno de otro país también se ponían todos de pie, pero no cantaban).

En el metro, camino de la zona olímpica con las entradas en la mano.

El estadio del Nido es chulísimo.

Por dentro. En marzo de 2013 fui otra vez y estaba todo bastante descuidado, el césped muerto, etc...


Aunque había ventanas y aberturas, la verdad es que en las gradas no corría mucho el aire y hacía bastante calor.

Al final de la jornada.

La mascota de los Juegos Paralímpicos. Dentro de la de la derecha se ve a un voluntario muerto de calor, jaja.
El Nido iluminado.

2 comentarios:

  1. No me hizo mucha gracia el Nido en directo. Parecía un poco plasticoso. En las fotos luce más.
    A mí lo mismo, me gusta ver la gimnasia, un poquito, quizá la natación masculina, para ver piernas, o los saltos de trampolín y poco más. Mi hermano me regaló una entrada para la final de atletismo en el 92 en bcn, porque curraba allí. Era una entrada que valía un potosí, cuando llegué al estadio me hubiera gustado venderla, había gente intentando conseguir una y pagaban mucho. Me dio mala conciencia y entré a ver qué eran unos juegos olímpicos. Hacía un sol de justicia, y ver tipos corriendo me pareció un rollo. Estuve media hora y me fui.

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  2. https://www.youtube.com/watch?v=e9c1kROcxwU

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