martes, 29 de mayo de 2018

Grafitis en Suzhou

(Nota: yo pensaba que en español no había forma aceptada para escribir graffiti, pero dice la Fundeu que sí la hay y que es grafiti. Pues la usaré a partir de ahora).

Alguna vez he mencionado que en China prácticamente no hay grafitis (por ejemplo, aquí y aquí), aunque durante los años de Mao y hasta los 90 las consignas pintadas en las paredes eran una de las formas de comunicación más importantes. Pero bueno, supongo que eso no cuenta como grafiti, sino como propaganda.
Como estas, por ejemplo. La única que soy capaz de leer dice "muerte al capitalismo".

Así que me sorprendió enterarme de que iba a haber una exhibición de grafitis en Suzhou y el sábado fuimos a la inauguración. Se organizaba como actividad paralela de la bienal de arte Jinji Lake de Suzhou, que yo tampoco conocía (no sé cómo lo hago pero nunca me entero de nada. Vivo en mi burbuja). Curiosamente, tres de los artistas invitados (y los únicos que estuvieron en persona en la inauguración) eran españoles. La exhibición era en una especie de "parque creativo" donde hay naves industriales, tiendas y un museo. Los grafiteros pintaron varias piezas en los muros de las naves y me hizo mucho gracia ver a un grupo de abuelas contemplando con mucho interés los grafitis.
Este es el que las abuelas miraban embelesadas. "¡Es un polo!".




También había una pequeña exposición en una sala que había allí y proyectaban un vídeo de uno de los grafiteros pintando en una de las calles de Suzhou. De repente salía una abuela que vivía por allí y se ponía a mirar. "Le va a echar la bronca al grafitero", dijo C. cuando lo estábamos viendo. Pero qué va, miraba simplemente en plan "qué estará haciendo el extranjero este". Yo creo que las personas mayores chinas no tienen el concepto de "los grafitis son una guarrería y ensucian las calles" que tienen en Occidente, supongo que porque prácticamente no los han visto nunca (y cuando los han visto han sido en forma de eslóganes políticos puestos por el gobierno).


También hubo una pequeña presentación de los organizadores y los grafiteros y un grupo tocó unas cuantas canciones. Había bastante gente y un montón de niños que estaban disfrutando a tope de las bebidas y los aperitivos gratis.

Foto del barrigón para la posteridad.

lunes, 21 de mayo de 2018

Por qué Suzhou es un buen lugar para vivir

A veces me escribe gente para preguntarme cómo se vive en Suzhou. Muchas veces se trata de señores/padres de familia a los que les han propuesto un traslado a la sucursal de Suzhou o les ha surgido una oferta interesante aquí. Una de las primeras cosas que me preguntan es: "¿Es mejor vivir en Shanghai y que mi mujer y mis hijos estén allí mientras yo voy y vengo de Suzhou cada día?". Cada vez que leo algo así se me abren las carnes pensando en el pobre señor malgastando 3 horas cada día yendo y viniendo (y 3 horas es en el mejor de los casos, si viviera al lado de la estación de tren en Shanghai o con una conexión cercana y directa en metro y si su oficina estuviera cerca de la estación en Suzhou). Supongo que siempre consideran esta opción primero, sobre todo si nunca han estado en China, porque quizás nunca han oído hablar de Suzhou pero saben que Shanghai es una ciudad moderna y desarrollada.

Yo siempre les digo que ir y venir cada día es un coñazo impresionante (lo sé por experiencia propia, menos mal que solo duró 3 meses) y que además, en mi opinión, para una familia es muchísimo mejor vivir en Suzhou que en Shanghai. Ahora es cuando miss Y. intenta asesinarme, ja ja ja. Seamos serios: lo único que Shanghai tiene y Suzhou no es una agitada vida nocturna, y dudo que esa sea una de las prioridades de las parejas con niños. Estas son mis razones por las que Suzhou es mucho más adecuado que Shanghai para una familia (me voy a referir en general al Suzhou Industrial Park, que es el barrio de Suzhou en donde yo vivo. Y con barrio no os imaginéis 4 manzanas, no, es gigantesco, tiene 288 kilómetros cuadrados y una población de unos 2 millones).

- Alquileres baratos
Los alquileres en Shanghai son absolutamente ridículos, cada año suben más y los extranjeros normalmente quieren vivir en zonas céntricas y bonitas. Por menos de la mitad de lo que costaría un piso de aprobado raspao en el centro de Shanghai puedes alquilar un piso grande y nuevo en el Suzhou Industrial Park, en un residencial con amplios jardines bien cuidados y cerca de todas las comodidades. Los residenciales más lujosos tienen piscina, gimnasio y cosas así y hay un montón de parques y centros comerciales, así que siempre tendrás alguno cerca.
Nico en el parque.

- Guarderías y colegios más baratos
No tengo experiencia con esto, pero me lo han contado quienes sí la tienen. Hay varias guarderías y colegios bilingües o internacionales y, aunque yo no los llamaría baratos ni de lejos, sí que son más baratos que en Shanghai. Los extranjeros cuyos hijos van allí están contentos con la calidad de la educación. De todas formas, los colegios internacionales suelen ser parte del paquete de expatriación de los que vienen aquí enviados por su empresa, porque son un buen pico (unos 25 000 euros al año, sin incluir el autobús, el uniforme, los materiales, las comidas, etc).


- Zonas verdes
El Suzhou Industrial Park fue un proyecto en cooperación con el gobierno de Singapur y se nota porque no se parece a otras ciudades chinas. Aquí las calles son anchas, hay mucho espacio para los peatones, carril bici por todas partes... Y, como he dicho antes, muchos parques. ¡Y también lagos!
El lago Jinji y la orilla este.

- Menos ruido
¡Sí! ¡Una ciudad china en la que no te despiertan a las 6 de la mañana los ruidos de los camiones, los viejos escupiendo los higadillos o los altavoces infames de tiendas o abuelas danzarinas! ¡Hasta se puede oir el canto de los pájaros! ¡Y no me tengo que poner tapones para dormir!


- Menos gente
Supongo que por el diseño de esta parte de la ciudad, con calles anchas y tal, no tienes la sensación constante de estar dentro de un hormiguero. Claro que el metro va a estar petado a las 8:30 de la mañana, o el centro comercial más chic el fin de semana, pero siempre habrá menos gente que en Shanghai.
Un sábado por la tarde...

- Productos de importación
Una vez un colega de trabajo que vive en Shanghai me preguntó si en Suzhou había Nutella. Pues claro que hay. Y queso, y pan, y aceitunas. Tenemos un montón de supermercados de productos importados. Y las tiendas online para extranjeros de Shanghai hacen repartos en Suzhou también.
También tenemos chocolate.


- Cosas interesantes que ver/hacer
Suzhou es una ciudad antigua con un montón de historia. Hay muchísimos lugares de interés turístico, como jardines, templos, pagodas, museos o calles tradicionales. Si te va más la naturaleza, tenemos montañas relativamente cerca, un lago gigantesco (el lago Tai) y muchos otros más pequeños, pueblos antiguos, granjas donde puedes ir a recoger (y comer) fruta de temporada...
El lago Tai.


Esto parece un anuncio de Suzhou, ¿no? Le tenía que haber pedido al ayuntamiento que me patrocinara, ja ja ja. El resumen de toda esta historia es: si te sale un trabajo en Suzhou, vivir en Shanghai es una tontería porque aquí se vive perfectamente. Y para las cosas puntuales que quieras hacer en Shanghai (conciertos, exposiciones, tiendas concretas) coges el tren y te vas allí a pasar el día.

viernes, 11 de mayo de 2018

"Mira, aquí está el pito"

El lunes me tocaba la revisión de las 24 semanas y una de las pruebas era una ecografía chachiguay en 3D. Pero, atención, en los hospitales públicos chinos el padre no puede estar presente en las pruebas de las revisiones prenatales, ni siquiera en las ecografías... Tócate el pie. Pero C. es un hombre de recursos y lo primero que hizo cuando empezó toda esta movida fue buscar un contacto en el hospital al que íbamos a ir. Así conocimos a la enfermera jefe de la sección VIP, que supongo que es amiga de la prima del vecino del padre de alguien con quien C. trabaja. Aquí los contactos, por lejanos que sean, funcionan muy bien. Total, que la enfermera jefe le dijo a C. que podía reservar una ecografía VIP en la que él sí pudiera entrar. Y eso hicimos el lunes.
Tranquilos, esta no es mi barriga y la máquina era bastante más moderna. Es una foto de internet.

Yo no estaba muy segura si nos iban a revelar el sexo porque, como seguramente sabéis, en China es ilegal que te lo digan. En hospitales chungos y en clínicas ilegales te lo dicen si les das un soborno, pero en los hospitales decentes no te lo dicen a menos que te conozcan (otra vez, la importancia de los contactos).

El doctor que nos hizo la ecografía era un señor bastante simpático que hasta se levantó a darme la mano al entrar (creo que le hace gracia tratar con extranjeros). Sin yo preguntar nada, y sin preguntarme él si yo lo quería saber, me dijo que... ¡Tachán! Es un niño. A lo que yo respondí que si no era ilegal contármelo. "No, la ley solo aplica a los ciudadanos chinos; a los taiwaneses, hongkoneses y extranjeros se lo puedo decir". Parece que la ley tampoco le aplica a C., ya que no le pidió que se tapase los oídos ni nada. Para demostrar que estaba en lo cierto, el médico nos enseñó el pito del niño en la pantalla: "Mira, aquí está el pito".

Por lo menos en esta prueba el médico iba enumerando en voz alta las partes que iba viendo y decía que estaban bien. En las demás pruebas no te dicen nada, a menos que haya algún problema. Hacerse las revisiones prenatales en un hospital chino es un poco como estar en una cadena de montaje, una mujer detrás de otra. Bueno, por lo menos tienen mucha experiencia. En este hospital ven más partos en un mes que en todos los de Cáceres en un año...

viernes, 4 de mayo de 2018

Las marcas y las falsificaciones

Allá por el pleistoceno, cuando llevaba poco tiempo estudiando en Beijing, vino mi familia a visitarme. Como querían ver otras partes de China y yo tenía clase contrataron un viaje organizado desde España y yo me acoplé los días que estuvieron en Beijing. El resto de la gente del viaje organizado eran parejas de mediana edad y recién casados. En el itinerario había previstas visitas a la Ciudad Prohibida, el Templo del Cielo, la Gran Muralla y demás lugares turísticos imprescindibles... pero el sitio al que todo el mundo estaba deseando ir (sobre todo las mujeres) era el Mercado de la Seda.


Por aquel entonces, yo ya había ido un par de veces al Mercado de la Seda y ya le tenía mucho asco. El Mercado de la Seda es un lugar de agobio y perdición donde van los turistas a comprar, principalmente, falsificaciones de marcas famosas de ropa, zapatos y bolsos. También hay seda, perlas y recuerdos típicos, pero eso ya a la gente le importa menos. ¡¡Ellos han venido a comprarse el bolso de Prada y las camisas de Ralph Lauren!! Incluso los extranjeros que viven aquí, muchas veces van a mercados de este tipo a comprar regalos de navidad antes de volver a su país.
Venga las Uggs, las Nike, las Converse, niña, barato, barato.


El procedimiento a seguir en el mercado de la seda es: te paseas por entre los puestos, te paras en uno a mirar algo y enseguida viene la dependienta a decirte "Barato, barato" (solo con verte la pinta ya sabe de dónde eres). Le preguntas cuánto valen los Levi's falsos que tienes en la mano y te da un precio más caro que si fueran auténticos. Pones cara rara y entonces te da la calculadora y te dice que le escribas un precio. Escribes un 10 % del precio que ella ha dicho y, tras poner cara de súper ofendida, escribe un precio un pelín más bajo que el primero. Si dices que no te interesa y te vas, ay amigo, te perseguirá por los pasillos y te agarrará del brazo para arrastrarte de vuelta a su puesto. Algunas veces incluso te llaman tacaño, así, en español.

Me intriga el tema de las falsificaciones. ¿Por qué la gente las compra? ¿La intención es que, al llevarlas puestas, los demás piensen que de verdad llevas un bolso de Chanel de 4000 euros? (O lo que valgan los bolsos de Chanel, que no tengo ni la menor idea). ¿O las compran simplemente porque les gusta el diseño pero no se pueden permitir el bolso auténtico? ¿De verdad a alguien le gusta el típico bolso de Louis Vuitton con las iniciales estampadas?

Me hace mucha gracia que los españoles vengan a China a comprar falsificaciones y los chinos vayan al extranjero a comprar los productos auténticos. Una vez que fui a Hong Kong me encargaron comprar un cinturón de Burberry (300 euros del ala) y en España compramos una vez un bolso de Louis Vuitton. Por lo menos no era el del estampado horroroso. No me acuerdo cuánto costó, ¿3000 euros? Pesaba como un muerto. Llevarlo colgado del brazo será como hacer pesas.

En el Mercado de la Seda también venden maletas, para que metas dentro todo lo que has comprado.