lunes, 23 de agosto de 2021

Anécdotas de chinos en España

El socorrista de la piscina pensaba que C. era japonés. Es algo que le pasa a menudo, incluso en China, aunque allí más bien suelen pensar que es coreano, y él bromea diciendo que es de Xinjiang. Una vez en Xiamen lo saludaron con un "anyong haseyo" achinado que debía ser la versión del "hallo" que usan con los coreanos. Un par de veces también le han dicho que se parece a un jugador de béisbol japonés de cuyo nombre no puedo acordarme.

El falso japocoreano haciendo la prueba del magnetismo de la vacuna de covid (tres meses después de ponérsela y en el otro brazo xD).

 

Total, que un señor mayor lo vio nadando en la piscina aquí en la urbanización y le preguntó al socorrista si era japonés. "Sí", fue su respuesta, aunque C. habla con él todos los días y ya le había dicho que era chino. Entonces el señor mayor se puso a hablar con C., y al rato me acerqué yo, sospechando que no se estaría enterando de mucho. Resulta que el señor era de Coria del Río y hacía poco se había enterado de que su bisabuela se apellidaba Japón, así que era descendiente de los japoneses que se instalaron en Coria del Río hace varios siglos (una historia muy interesante que se puede leer aquí y de la que casualmente habíamos estado hablando C. y yo hacía unos días).

Ahora el socorrista ya tiene clara la nacionalidad de C. y siempre lo saluda con un "nihao", aunque luego se pone a hablar en inglés ya que el chino no le da para más (normal).

Desde que estamos en España hemos ido a varios bazares de chinos, pero restaurantes solamente a uno en Cáceres hace un par de meses. Queríamos ir a un restaurante que hay en Rota, el pueblo al lado de Chipiona, porque resulta que se abrió en 1968 y es uno de los restaurantes chinos más antiguos de España. Lamentablemente, llamé para reservar y me dijeron que tienen el comedor cerrado y que solo entregan a domicilio (¿será por el covid? Ni idea. Los chinos son muy cautelosos con este tema). A bazares hemos ido a varios. En Cáceres hemos ido a uno muy grande de cuyo dueño C. dice que seguro que es el capo de los chinos de allí. A los de los bazares parece resultarles curioso ver a un chino que no conocen, con pinta de turista y con una española. También les hace mucha gracia que A. hable chino. En la primera visita al bazar de Cáceres ya nos hicieron descuento. En la segunda, le preguntamos al dueño dónde podíamos encontrar vinagre chino y, tras hacer unas llamadas, nos mandó a una tiendita de golosinas regentada por una pareja de chinos jóvenes en la que, además de pan y gusanitos, en una esquinita tenían tallarines importados, salsa de soja y vinagre chino.

¡La misma marca que compramos en China!

 

Aquí en Chipiona también hemos ido a varios bazares (es sorprendente la cantidad de ellos que hay). En el primero al que fuimos enseguida nos preguntaron qué hacíamos aquí. Que por qué habíamos venido, si en China la situación era mucho más segura. Lo decían con cara de "yo si pudiera me iba". Los chinos que viven aquí desde luego le tienen mucho más respeto a la pandemia que los españoles. La pareja dueña de ese bazar tiene dos niñas y siempre que vamos les dicen que hablen en chino con "el hermanito". En China, a alguien ligeramente más mayor que tú lo llamas hermano/a mayor (哥哥 gege/姐姐 jiejie), y a alguien un poco más joven, hermano/a menor (弟弟 didi/妹妹 meimei). Los de este bazar ya nos saludan hasta cuando simplemente pasamos por delante de su puerta. En la última conversación hace un par de días, el hombre nos contó que viven en el piso que hay encima del bazar y que en invierno también va bien el negocio (esto se lo preguntamos porque en invierno aquí vive poca gente).

En el restaurante chino al que fuimos en Cáceres (que era chinospañol, por supuesto. En Cáceres no hay chinos chinos. Podríamos montar uno... algo así modernito).

Comiendo con palillos y cuchara a la vez, como buen niño chino.