miércoles, 27 de mayo de 2020

Niño dentro vs niño fuera

Hay una cosa que me sorprende mucho de China y es la diferencia de actitud y creencias respecto a los niños no nacidos y los que ya están fuera de la barriga. Me explico: aquí cuando una mujer está embarazada, tiene un montón de limitaciones sobre lo que puede hacer y comer. ¡Muchísimas más que en Occidente! Quizás recordaréis una entrada que escribí hace un par de años sobre las creencias chinas durante el embarazo, y si no aquí hago un resumen rápido de los puntos más relevantes o que a mí me sorprenden más: no se puede hacer ejercicio; no se pueden tener mascotas; hay que cortarse el pelo para que no le robe nutrientes al feto; no se pueden comer, entre otros, almendras, piña, sandía, cosas de color oscuro, cangrejos, conejo, helados, mango, gambas... Todo esto son cosas que, supuestamente, pueden perjudicar al bebé.

Hasta aquí todo bien. Un poco exagerado y con bastante poca base científica, pero bueno. Lo curioso llega después, cuando el niño ya ha nacido. Al principio todo es con mucho cuidado y entre algodones, pero cuando ha pasado un poco de tiempo... ¡viva la Pepa, que los niños son indestructibles! ¿En qué sentido? En estos que detallo a continuación:

- Niños en coche sin sillita. Ver a abuelas sujetando al bebé en brazos en el coche ya no es tan frecuente como antes, al menos en Suzhou, pero cuando los niños son un poco más mayores ya no suelen usar la sillita. Vamos, es que creo que no he visto a ningún niño mayor de 2 años usando su sillita correspondiente dentro del coche. Ni el cinturón de seguridad, ya que nos ponemos. Y niños menores de 6-8 años sentados en el asiento delantero, dando saltos o sacando la cabeza por la ventana del techo también se ven normalmente.


- Niños en moto sin casco. En China mucha gente no tiene coche y se mueven en moto eléctrica por la ciudad. Muchos abuelos van así a recoger a los niños a la guardería o colegio. ¿Dónde los ponen? Pues, muchas veces, de pie delante del conductor. ¿Llevan casco? No, señora. ¿Pa qué, si los niños tienen la cabeza muy dura?
Cuatro en una moto. La niña de delante con sillita y todo, seguro que homologada.
¡Cinco en una moto! Esta foto la he sacado de un manual que alguien ha creado en Baidu explicando 6 cosas que hay que tener en cuenta al llevar niños en moto. ¿Menciona el casco en algún momento? Por supuesto que no. ¿Casco? ¿Eso qué es? El comentario que acompaña a esta foto no es "no lleves 3 niños y a la vecina en una moto", sino simplemente "no vayas muy rápido y no frenes de repente". Grandes consejos.


- Niños paseando con 250 de contaminación. Sí, ya sé que los niños tienen que salir de casa cada día dos horas como mínimo, pero si hace un aire espeso que no se ve el edificio de enfrente... mejor déjalo en casa. Aunque bueno, si no tienes purificador de aire es casi lo mismo. Cuando yo tenía que salir cada día varias veces para sacar a la perra no dejaba de sorprenderme la típica abuela sacando al bebé a "airearse" con una contaminación asquerosa.
Un día del año pasado. Normalmente tenemos pocos días con la contaminación tan alta como este, pero 3-4 veces el límite recomendado es normal.


- Niños a los que hacen la permanente. No sé qué sustancias llevan los productos para hacer la permanente, pero he oído que no te la puedes hacer si estás embarazada, así que no debe ser 100% seguro. ¿Para qué hacérsela a un niño? ¿En serio, para qué? Pues aquí es algo normal.
Se lo hacen tanto a niñas como a niños.


- Niños que se inflan a galletas y chucherías. Esto lamentablemente es algo que pasa en todo el mundo. Cuando el niño ya es mayorcito y ve que los demás niños comen esas cosas es más difícil conseguir que las evite, pero es que aquí venden cosas específicas para bebés que están empezando a comer y que están llenas de azúcar. Y, si tú no se las das, el niño ni sabe que existen. En China se me ocurre el ejemplo de las galletas, pero en España se me ocurren productos del tipo "Mi primer yogur". ¿Es que acaso los niños necesitan un yogur especial para ellos? Pues el mío se zampa los yogures naturales que hago yo, que no tienen azúcar, y le encantan. Si los niños solo quieren comer dulce es porque se les ha acostumbrado a ello. Como dato, según este artículo, en 1995 el 5% de los niños chinos tenían sobrepeso; ahora es ya el 20%.
"Leche de crecimiento para niños" que se anuncia un montón por estos lares. Segundo ingrediente de la lista: azúcar. Un aplauso, por favor.


Resumiendo: cuando el niño está todavía en la barriga, ay tenemos que tener mucho cuidado. Cuando el niño ya está fuera... ¡adiós precauciones y sentido común!

martes, 19 de mayo de 2020

Un año sin comprarme ropa

El año pasado me propuse intentar estar un año sin comprarme ropa. No es que yo sea muy fashionista ni nada de eso, a mí la moda me la trae totalmente al pairo; pero sí que normalmente me gustaba comprarme alguna cosita cada temporada. La última vez que me compré algo fue en febrero del año pasado, cuando me pillé unas camisas y unos pantalones de estar por casa en el H&M (las camisas siguen bien, los pantalones ya están llenos de bolas, gracias por preguntar, pero la verdad es que me los he puesto muchísimo). En ese momento, allí en el H&M, fue cuando me sentí culpable por comprarme ropa nueva que ni siquiera se puede decir que necesite y contribuir a la contaminación y a la explotación de costureras en Camboya y Bangladesh (fabricar en China ya es demasiado caro para las marcas estas). Así que decidí intentar no comprarme nada nuevo en un año. Y casi lo he conseguido: en septiembre me tuve que comprar un sujetador de lactancia porque se me rompió uno de los dos que tenía, pero aparte de eso no me he comprado nada más. Así que yo considero que sí he alcanzado mi objetivo, jajaja.

La verdad es que no me ha costado mucho esfuerzo. Como trabajo desde casa, mis modelitos de lunes a viernes son camisetas viejas y pantalones de chándal. La ropa "de salir" solo me la pongo los fines de semana, y durante los primeros meses de este año tampoco es que saliera mucho, así que mucha se conserva como nueva. Aparte, ahora con el niño tampoco es fácil ir de tiendas a mirar ropa, y por internet es una lotería. Vamos, que no tengo ningún mérito por no haberme comprado nada en un año...
El otro día cenando hot pot. Esa camiseta de los ojos la compré en 2013, creo. Es de Uniqlo.


Me acordé de este tema porque el otro día en una cuenta de Instagram que sigo hablaron sobre las cadenas estas de moda rápida y lo malas malísimas que son para el medio ambiente. Uno de los puntos que mencionaban es que las prendas de estas marcas son de muy mala calidad, a los pocos lavados están hechas mierda y la gente las tira tras ponérselas un par de veces. A mí este tipo de afirmaciones me sorprenden bastante porque la mayoría de mi ropa es de cadenas de moda rápida y mi armario debe tener una edad media de 5 años... El domingo pasado iba vestida con una falda de H&M que compré en 2010 y una camiseta de Uniqlo que compré en 2013 (los zapatos creo recordar que los compré en 2012 y el año pasado les cambié las suelas y están como nuevos). No sé por qué a mí me duran tanto las cosas y a los demás no, ¿será que ponen la secadora a todo trapo?

Al niño sí que le he tenido que comprar cosas, claro, aunque tampoco muchas. El 80% de su ropa es de segunda mano porque tengo un par de amigas que siempre me están dando ropa de sus hijos. Tengo 4 cajas con ropa hasta los 6 años, jajaja. También a veces compro prendas de segunda mano en un grupo de WeChat de mamás de Suzhou. Comprar ropa de niños de segunda mano es muy sencillo, de adultos... no tanto. Y menos con mi talla, que no es precisamente talla china, jajaja.
Esta camiseta negra es nueva en mi cabeza, pero la compré a finales de 2013... es de Threadless.com. La camiseta y los pantalones de A. son de segunda mano.

Este fin de semana he hecho por fin el cambio de armario porque la ropa de invierno me estaba dando calor solo de verla. He jubilado algunas cosas que estaban ya muy gastadas y creo que es la primera vez que mi armario no está lleno a reventar. No me importaría comprarme algún vestidito, pero me da tanta pereza ir de tiendas...


miércoles, 6 de mayo de 2020

Las peluquerías chinas

Hoy Baby A. se ha cortado el pelo por primera vez en su vida y me he dado cuenta de que nunca he escrito sobre las peluquerías chinas. ¿Es que las peluquerías chinas son distintas de las españolas? Bueno, un poco sí, tienen algunas características curiosas...

La que más llama la atención es que en España la mayoría de las peluqueras son mujeres. Bueno, esta afirmación no está basada en ninguna estadística, sino en mis observaciones personales, jajaja. Cuando hay un hombre peluquero, suele ser gay (esto también lo digo según mi experiencia). En China, por el contrario, jamás he visto a una mujer peluquera. Que no digo que no haya, pero yo no he visto, así que deben ser una minoría. En las peluquerías hay mujeres trabajando, pero de cajeras, recepcionistas o lavacabezas. ¿Qué? ¿Es que hay un puesto especial de lavacabezas? Sí, señora. Los que cortan el pelo son todos chicos jóvenes y a veces tienen pinta de grupo musical vietnamita.

Sí que hay un tipo de "peluquería" en el que solo trabajan mujeres: las "peluquerías" que en realidad ofrecen otros servicios que os imaginaréis cuáles son cuando os diga que las "peluqueras" van con escote y minifalda y que los servicios extra se dan en la trastienda. Este tipo de peluquerías lo he visto en callejuelas del centro de Suzhou y cada vez se ven menos. En mi barrio no hay.



En esta foto se ve una peluquería típica como las que hay en mi calle. Son bastante amplias y tienen un montón de sillas y un batallón de peluqueros tijera en mano. Nada más entrar te recibe un coro de bienvenidas y si hay sitios libres la recepcionista te lleva directamente a que te laven la cabeza. Suelen lavarte el pelo un par de veces dándote un masajito muy gustoso. En algunas peluquerías también dan un masaje de hombros cuando estás ya en la silla de cortar. Luego te preguntan qué categoría de peluquero quieres que te corte: el normal, el estilista superior o el superestilista exclusivo. Cada categoría tiene un precio diferente, claro, de menor a mayor. Yo siempre elijo el peluquero normal. No soy muy exigente, pero me parece que lo cortan decentemente o al menos a mí siempre me dejan bien.



En algunas peluquerías son muy pesados y mientras te cortan el pelo te ofrecen tal o cual producto o que te hagas la tarjeta VIP. A veces incluso te dicen que tu pelo tiene no sé qué problema pero afortunadamente ellos tienen un champú buenísimo para eso. Yo siempre digo que no a todo y a veces incluso finjo que no hablo chino para que no me den la brasa. Lo de la tarjeta VIP me hace mucha gracia porque voy a la peluquería dos veces al año como muchísimo, así que para amortizarla tendría que estar unos 20 años yendo a la misma peluquería. Bueno, mejor me callo a ver si ahora voy a tener que ir cada mes a que me tiñan mis cada vez más abundantes canas.

No sé si los peluqueros chinos trabajan por turnos pero las peluquerías están abiertas todo el día, desde por la mañana hasta las 9 o las 10 de la noche. Y a todas horas tienen gente, ¿eh? Lo bueno es que como suelen tener muchos estilistas y asientos no hay que pedir cita ni nada, llegas y si está lleno normalmente solo tienes que esperar unos minutos.

Otra cosa graciosa de las peluquerías chinas es que por las mañanas, antes de abrir, salen todos los empleados a la calle y bailan y cantan. No sé si es para calentar los músculos, para entretenerse o para qué.

Creo que hace casi un año desde mi última visita a la pelu... ya me va tocando, jajaja.