Hoy quería contaros mi experiencia pariendo en un hospital chino. Los hospitales chinos no tienen buena fama entre los extranjeros pero sinceramente yo creo que gran parte del problema es el idioma; yo siempre he ido a hospitales chinos y sigo viva y entera. Cuando he ido a hospitales internacionales me han sacado bien los cuartos y no he quedado muy satisfecha con los resultados (en una ocasión no supieron decirme qué me pasaba y en otra me diagnosticaron algo que no tenía; en ambas ocasiones me soplaron 800 yuanes que afortunadamente pagó el seguro). Parir en un hospital internacional supongo que cuesta de 50.000 yuanes para arriba. Como yo no necesito pagar el triple simplemente para que el médico hable inglés, elegí el hospital municipal de Suzhou, también conocido como hospital de maternidad y al que van todas las suzhounesas de bien.
El último selfie con barriga. |
Salía de cuentas el 27 de agosto y cuando pasó esa fecha todo el mundo se empezó a poner nervioso... como si yo pudiera decidir cuándo ponerme de parto. El día 30, en la revisión de la semana 40, me hicieron una ecografía y descubrieron que tenía el líquido amniótico un poco bajo. Como el cuello del útero ya estaba medio borrado, la médico decidió que lo mejor era que me provocaran el parto ese mismo día y que me quedara ya en el hospital. ¡Y yo no había traído la maleta! Así que C. volvió a casa a por los trastos mientras yo firmaba toda la papelada del ingreso. Tuvimos suerte y se acababa de quedar libre una habitación familiar, que es una habitación tipo hotel con baño, cocina, saloncito y cama supletoria y pares allí mismo.
Mientras C. estaba yendo a buscar los trastos, vino una médico diciendo que ya era tardecillo (era la 1 de la tarde) y que me iban a romper la bolsa ya. Pero como estaba yo sola en ese momento, y los resultados de las demás pruebas que me habían hecho esa mañana eran buenos, al final la médico decidió esperar a ver si me ponía de parto yo sola durante la noche y si no me romperían la bolsa a la mañana siguiente. Así que pasé la primera noche en el hospital todavía con el barrigón y... ¿sabéis qué? Las enfermeras volvieron a despertarme a horas innombrables para escuchar los latidos del bebé y tuve un flashback a cuando me ingresaron en julio.
Por la noche no hubo ningún avance y a la mañana siguiente vino un médico a romperme la bolsa, lo que hizo después de preguntarme dos veces si no tenía problema con que fuera hombre. La rotura de bolsa no me dolió y no salió mucho líquido. Lo peor fue que a partir de ese momento no podía levantarme de la cama por si salía el cordón umbilical antes que el niño o algo así. Al rato me pusieron un gotero (¡¡¡noooo!!!) con oxitocina y al poco tiempo me empezaron las contracciones. A las dos horas, cuando estaba de 3 cm, pedí la epidural. Esto tampoco duele, a pesar de lo que me habían dicho. Lo que le gusta a la gente acojonar a las embarazadas... Con la epidural seguía notando las contracciones pero eran soportables. También podía mover los dedos de los pies, eso no me lo esperaba. Al cabo de dos horas ya había dilatado del todo y mi comadrona estaba muy contenta porque era la que más rápido estaba progresando de toda la planta (¿harán cada día una porra para ver quién pare primero?).
La comadrona era una chica bastante joven y estuvo todo el rato conmigo desde que me pusieron la oxitocina. Charlé bastante con ella y era maja. Ella fue también la que dirigió el cotarro, sacó al bebé, cortó el cordón (C. no tenía mayor interés en hacerlo, le daba miedo desmayarse) y me cosió un pequeño desgarro. La fase de pujos duró una hora aproximadamente y no sé en qué momento aparecieron un montón de médicos/enfermeras/comadronas en mi habitación, quizás eran estudiantes. Yo le había dicho a la comadrona que no quería que me hicieran una episiotomía y me dijo que solo las hacían si era estrictamente necesario (no lo fue. ¡Bieeeen!). Un poco antes de las 4 salió el bebé y me lo pusieron encima enseguida (en ese hospital son pro lactancia, el bebé se queda todo el rato contigo en la habitación y no le dan suero ni biberones). La comadrona cortó el cordón cuando dejó de latir, como yo le había pedido, y se confirmó que yo había sido la más rápida en parir de toda la planta. Las enfermeras comentaban cosas del tipo de "qué fuertes son las extranjeras", jajaja.
Nos quedamos en el hospital dos noches más y el precio total fue de 13778 yuanes, lo que me parece bastante barato. Quedé muy satisfecha con ese hospital y se lo recomendaría a quienes vayan a dar a luz en Suzhou, pero claro, inglés no hablan, jajaja. Lo que es la atención, no tiene nada que envidiar a los hospitales internacionales que cobran 3 o 4 veces más.
La vista desde mi ventana del hospital. Esa noche cayó un tormentón... |