miércoles, 27 de mayo de 2015

Comidas de temporada

Tras varios años en Suzhou me he dado cuenta de que puedes saber más o menos en qué época del año estás sin mirar el calendario. Simplemente fíjate en las frutas de temporada que ves en el mercado o en lo que ofrecen para cenar los puestos callejeros y sabrás en qué mes estás. Algunos de estos productos los hay en otras partes de China, por supuesto, pero ni en Beijing ni en Shanghai he visto tanto furor como en Suzhou. Es llegar la segunda mitad de mayo, por ejemplo, y ver a absolutamente todo el mundo cargando con 枇杷 pipa (nísperos), o llegar octubre y ver cangrejos peludos por todas partes. Aquí va la lista.

- Cangrejos de río (小龙虾 xiao longxia): en chino se llaman literalmente "langostas pequeñas". Se empiezan a ver a finales de abril y el lugar favorito para comerlos son los restaurantes callejeros. Al lado de mi apartamento en Shanghai hay un pequeño restaurante con mesas en la calle y desde hace varias semanas siempre está lleno de gente comiendo cangrejos de río. La verdad es que huelen a gloria bendita, pero cuando los probé me decepcionaron bastante: están muy picantes (tanto que no sabes qué sabor tiene el cangrejo en sí; sospecho que no muy bueno) y la cantidad de carne que te comes en cada uno es mínima: más de la mitad del cangrejo es cabeza. Mucho rechupeteo y mucho guarreo de manos para al final nada. Normalmente se comen con guantes de plástico para evitar ponerse demasiado perdido, y en la mesa se pone una palangana para tirar todas las cáscaras.



- Nísperos (枇杷 pipa): en España los debe haber, pero yo nunca los había comido. La temporada empieza a mediados de mayo más o menos y solo dura dos o tres semanas. La locura es total: a las afueras de Suzhou hay una montaña con muchos nispereros y durante estas semanas se forma un atasco impresionante de familias y grupos de amigos que van a recoger nísperos. Cerca del lago Tai los campesinos se han montado el negocio del siglo: plantan árboles y cobran a la gente de la ciudad por recoger las frutas (y llevárselas, claro). Con lo fácil que es comprarlas en la frutería... o que te las regalen en la oficina. Las empresas de Suzhou tienen costumbre de mandar cajas y cestas de nísperos a sus clientes, y a veces también reparten entre los empleados. 



- 粽子 zongzi o triángulos de arroz pegajoso envueltos en hojas de platanero: de estos ya he hablado en el blog alguna vez. Se empiezan a ver a finales de mayo pero son típicos de la fiesta de los barcos dragón, que normalmente cae en junio (con esto del calendario lunar nunca se sabe). Los hay con relleno dulce o salado: el dulce es de pasta de alubia roja y el salado es con carne y a veces huevo cocido. Soy una fan total de los zongzi. Me encanta el arroz pegajoso en todas sus variantes. ¡¡Qué ganas tengo de que llegue ya la temporada!! En mi empresa anterior siempre nos regalaban unos cuantos zongzi cuando llegaba junio. La abuela de C. los hace y el año pasado me senté con ella a hacer algunos, sin demasiado éxito (envolverlo en la hoja es más difícil de lo que parece, pero creo recordar que al menos uno hice bien).
Mi favorito es el de carne. Agggg (baba que se me cae).
Envolviendo zongzi con la abuela de C. el año pasado.

- Arrayán o fresa china (杨梅 yangmei): de esto también hablé ya una vez. La temporada es más o menos a la vez que la de los zongzi, y al igual que con los nísperos las empresas regalan cestas de arrayanes a sus clientes y empleados. Antes de comerlos hay que tener en cuenta que hay en ponerlos en agua con sal durante un rato para que salgan unos gusanitos blancos que viven en su interior. Aunque si estás falto de proteínas te los puedes comer con gusanitos y todo. Lo que no mata engorda.



- Sandía (西瓜 xigua): esta no necesita explicación, la sandía es la gran favorita del verano en todo el mundo, yo creo. La diferencia entre China y España es que mientras que en España la cortamos en dos mitades y de cada mitad vamos sacando tajadas, en China agarran una cuchara y se jalan media sandía a cucharadas. Lo he probado y he de decir que no es mal sistema; cortar las tajadas de la sandía siempre me había parecido demasiado complicado ya que nunca tengo cuchillos tan grandes.

La imagen más típica del verano pekinés es un señor mayor con camiseta imperio arremangada (enseñando la barriga) comiendo sandía y abanicándose con un pai-pai de bambú, pero como no he encontrado ninguna foto así pongo esta de la sandia nada más.

- 鸡头米 jitoumi o arroz de cabeza de pollo: esto sí que no tengo ni la más remota idea de cómo se llama en inglés o en español. Según pone en la wikipedia, son las semillas de una especie de nenúfar gigante. Son redondas y con un piquito, de ahí lo de "cabeza de pollo". Se cocinan en una sopa dulce y tienen una textura firme pero blandita que me encanta. La temporada es alrededor de septiembre.



- Cangrejos peludos (大闸蟹 da zhaxie): entre Suzhou y Kunshan hay un lago que se llama Yangcheng y allí se crían unos cangrejos que son famosos en toda China. Cuando llega octubre, todos los restaurantes finolis del país sirven cangrejos del lago Yangcheng a precios astronómicos. Se llaman cangrejos peludos porque tienen como una especie de manguitos de pelo en las pinzas. En Suzhou, claro, son el orgullo local. Están muy buenos, pero al igual que me pasa con los cangrejos de río, mucho rechupeteo y pringoteo de manos para muy poca carne. La mejor parte del cangrejo es lo amarillo que está dentro de la barriga, aunque es muy graso.
Cangrejos peludos. ¡Tienen hasta denominación de origen!


Qué hambre me ha entrado, copón.

jueves, 21 de mayo de 2015

La Comic Con de Shanghai

El fin de semana pasado fue la Comic Con de Shanghai. Era la primera vez que se celebraba y varios de mi oficina esperábamos el evento con ansia. ¡Una Comic Con en China! La última vez que fui a algo parecido fue hace unos 10 años, al Salón del Cómic de Granada. Pero la de Shanghai parecía que iba a ser más a lo grande, como las americanas, con actores famosos y tal. ¡Iba a venir Lee Pace! Ya estaba yo relamiéndome imaginando la envidia que le iba a dar a todo el mundo en Facebook si colgaba una foto con él. Pero Lee Pace canceló su visita, y de todas formas hacerse fotos con famosos costaba 800 RMB (más de 100 euros). Y tan tonta no estoy.

La entrada a tan esperado evento costaba 180 RMB, más de 20 euros. Un poco cara, pero bueno, una vez al año no hace daño. Allí nos plantamos C. y yo el sábado con miss Y. Había bastante gente, y a primera hora, antes de que abrieran las puertas, la cola en la calle era considerable (una de mi oficina se presentó allí a las 9 de la mañana). ¡Menos mal que nosotros llegamos con la calma y no tuvimos que hacer cola!

Yo iba con ganas de ver qué comics vendían, a ver si había algo que mereciera la pena, ediciones extranjeras difíciles de encontrar en China, o historietas chinas, pero, ay, amigos, mi gozo en un pozo. En la Comic Con de Shanghai apenas había cómics. Qué decepción. Todo eran muñequitos, figuras de películas, videojuegos, Star Wars... vamos, que lo podían haber llamado Geek Con, o cualquier otra cosa, porque cómics, lo que se dice cómics, solo había en un par de puestos. Y nada que no se pudiera conseguir en Amazon China. Y ni un solo stand de editoriales.

Eso sí, gente disfrazada había un montón.

Maquillaje de película.

Star Wars.

Qué miedito.

En este mural la gente hacía dibujitos.

Había un montón de Masacres.

En el escenario había un famoso que yo no conocía.

Hulk acabó derrengao.

jueves, 14 de mayo de 2015

Mi primera boda china

Hoy voy a hablar de la primera boda a la que asistí en China. También fue la más interesante de todas a las que he ido, por cierto.

Corría noviembre de 2007 y yo era una feliz estudiante extranjera en mi segundo semestre en Beijing. Un día, una chica china-boliviana que era la compañera de habitación de mi amiga nos dijo que su primo se casaba en Qingdao y que tenía que ir a la boda, pero no le apetecía ir sola. Total, que su primo le dijo que podía traerse a algún amigo para no ir sola. Y en vez de a uno, se llevó a siete.
Y así fue como una pareja de Qingdao acabó teniendo en su boda a 7 extranjeros a los que no había visto nunca.

En China las bodas no son tan formales como en España, eso se ve en la foto. Los invitados a las bodas van vestidos con ropa de diario. Solo los novios, los padres y si acaso los padrinos van arreglados. Por cierto, con "padrinos" me refiero a la mejor amiga de la novia y al mejor amigo del novio, cuya función principal en la boda es la de emborracharse. En las bodas es requisito indispensable que la pareja brinde con todos y cada uno de los invitados, pero como está feo que el novio acabe potando en su propio banquete se lleva a un amigo para que beba por él. Ser padrino en una boda china es la putada del siglo.

Esta boda fue bastante interesante porque pudimos presenciar algunos de los ritos típicos chinos. Por ejemplo, cuando el novio va a casa de la novia a llevársela para siempre. Las amigas de la novia se encierran con ella en su habitación y no dejan pasar al novio. Este se tira un buen rato fuera llamando a la puerta, gritando tonterías que le hacen decir las amigas y pasándoles sobres rojos con dinero por las rendijas para sobornarlas y que abran. Cuando las amigas deciden que ya está bien abren la puerta y el novio entra.

Cuando por fin le abrieron la puerta. Obsérvese el sobre rojo con el soborno correspondiente.

Entrar en la habitación no solucionó todos los problemas del novio: las amigas habían escondido los zapatos de la novia y hasta que no los encontrara no se podían ir. Busca que te busca, más bromas, más sobornos, y al final encontró los zapatos, la novia se los puso, y bajamos a la calle.

En la calle había un grupo de jubiladas vestidas de rojo metiendo un ruido impresionante con los tambores. Después vino la danza de los leones, que fue la primera vez que la vi.

Las abuelas escandalosas.

Posando con los leones.

Después fuimos al restaurante a ponernos púos. La novia se cambió de ropa y se puso un vestido rojo para hacer la ceremonia de reverencias a los padres. Luego hubo los consabidos brindis. En algún momento del banquete yo lloré literalmente de risa porque en la mesa de al lado una niña pequeña echó la pota. ¿Que no tiene gracia? Tendríais que haberla visto: estaba subida a una silla y desde allí lanzaba el chorro en plan fuente. Luego una camarera vino con una escoba y lo barrió. El suelo no era azulejos sino moqueta. Yo ya no podía más, casi me ahogo. Creo que es la vez que más me he reído en mi vida.

Luego vino el karaoke. Una señora mayor deleitó a todos con esta maravillosa canción que inmortalicé y subí a youtube para que quede constancia por los siglos de los siglos. Mi amiga Lupe cantó la de "My heart will go on" y le aplaudieron a rabiar. 

Por cierto, en las bodas chinas no se come tarta. En el escenario/al lado de la mesa principal siempre hay una tarta de esas típicas con muchos pisos, y los novios hacen el paripé de cortarla con la espada, pero los invitados no la catan. De hecho no sé si alguien se la come. Creo que solo un trozo es de verdad, para poder cortarlo, y lo demás es de porexpán. Qué desilusión. Yo en mi boda tendré una tarta de verdad y le daré a todo el mundo.

martes, 5 de mayo de 2015

Trabajo en equipo

En las empresas en China es habitual organizar una jornada de "team building" o trabajo en equipo en la que toda la oficina se va a algún sitio a hacer cosas diferentes de las que hacen normalmente. Por ejemplo, trepar paredes, tirar de la cuerda en equipos o dispararse unos a otros. Si la empresa es china, china, la jornada de trabajo en equipo será durante el fin de semana y te robarán un día de descanso por todo el morro; si la empresa es extranjera o medio decente, lo organizarán en un día de diario. Es trabajo, al fin y al cabo.

En mi primer año en la empresa en la que trabajaba antes en Suzhou organizaron la jornada de trabajo en equipo durante un fin de semana y además incluía quedarse a dormir en un pueblo. Los mandé a tomar por donde amargan los pepinos y no fui. El segundo año también lo hicieron en sábado pero era solo una mañana y la actividad era laser tag, así que fui y también me llevé a C. El laser tag es bastante mierda (te disparas con pistolas láser a una especie de armaduras, pero falla más que una escopeta de feria y aparte yo nunca me enteraba si me habían dado o no) y aquel día hizo un calor horrible. Acabamos todos sudando como cerdos.

Este año, el primero en mi nueva empresa en Shanghai, organizaron el team building en un día de diario. ¡Bieeen! La cosa consistía en ir al Century Park, un parque enorme que hay en Pudong, comer allí el picnic que había preparado la empresa y luego hacer las pruebas, que básicamente eran encontrar cosas escondidas por el parque.

Bueno, la primera prueba era una carrera de relevos empujando un limón con una tubería de plástico.

La parte de buscar cosas escondidas por el parque salió un poco rana. Estábamos divididos en grupos de 3 y cada grupo tenía que encontrar una cosa siguiendo las coordenadas que nos mandaba el organizador. También nos enviaba una foto del lugar donde había que buscar el objeto.

Mientras andábamos por el parque buscando las cosas teníamos que llevar globos atados a la cintura; los de otros equipos podían atacarte y reventar tus globos para restarte puntos.

Mi equipo terminó la primera tarea bastante rápido porque en la foto se veía un edificio y gracias a eso localizamos rápidamente el lugar correcto. Al terminar la tarea tenías que volver al punto de partida a hacer una miniprueba y a que te dieran las instrucciones de la siguiente tarea. Nuestra primera miniprueba fue contestar preguntas sobre la oficina, del tipo: "¿ Cuántas sillas hay en la sala de reuniones?" y "¿Cuál es la suma de los años de nacimiento de todas las personas de la oficina?".

Pero la segunda tarea nos llevó más de una hora; en la foto solo se veían árboles y encontrar un sitio siguiendo las coordenadas de latitud y longitud es bastante jodido (las aplicaciones de brújula en el móvil no se actualizan en tiempo real). Aparte, cuando por fin conseguimos encontrar el lugar correcto, resulta que el objeto que teníamos que localizar había desaparecido: era un periódico y probablemente se lo había llevado el barrendero.

Nuestra pose de "después de más de una hora dando vueltas por el parque hemos encontrado el sitio y el puñetero periódico no está". Nótese que ya no nos quedaba ningún globo. Sufrimos un par de emboscadas.

En total cada equipo tenía que finalizar 15 tareas; cuando ya había pasado más de la mitad del tiempo y cada equipo solo había terminado 1 o 2 tareas se vio que la cosa no iba bien. Así que el organizador decidió que hiciéramos solo las minipruebas.

Una de ellas era sacar calcetines (nuevos) de una palangana usando pajitas. De las del té con bolas, que son más gordas.

Y así pasamos el día. Si no fuera por el calor, mucho mejor que estar en la oficina.
Se supone que había premios para los tres mejores equipos pero ya ha pasado una semana y todavía no sabemos quiénes son los ganadores.