Los recres

Me da la impresión de que las salas de juegos recreativos son algo muy pasado de moda en España. Pero en China están en pleno auge. Son un sitio pensado para toda la familia, allí te puedes encontrar familias enteras (aunque aquí eso solamente es una pareja con un niño) o abuelas que prefieren disfrutar de la oscuridad y el aire acondicionado y se pasean como quien se da un garbeo por el parque.

Para disfrutar de una tarde de entretenimiento, luces de neón y musiquilla de feria solo hay que cambiar un poco de dinero de verdad por fichas-moneda de la sala recreativa.

Hay todo tipo de maquinitas: se puede jugar al tenis como en la Wii,

La rubia efectuando un revés con postura perfecta

se puede tocar la batería,

Yo ni lo intento, demasiado complicao pa mí

se puede hacer de DJ,

En este juego veías a los chinos super enganchados apretando 374645 botones por segundo. Impresionante.

se puede bailar,

A este mejor ni me acerco tampoco

se pueden meter canastas,

se pueden matar bichitos a martillazos,

Este cansa que no veas

y por supuesto se puede jugar al clásico de los coches.

Según la rubia es difícil controlar el coche, la pobre se iba chocando contra el quitamiedos todo el rato.

Y aparte de las máquinas de videojuegos también hay unas máquinas muy extrañas en las que echas fichas-monedas y puedes ganar más fichas-monedas. Como en China los casinos están prohibidos parece que todos los ludópatas se consuelan con estas máquinas, pero no entiendo muy bien el sentido. ¿Para qué quieren más fichas-monedas si no juegan a ningún juego, solamente al de conseguir más fichas-monedas, y las fichas-monedas no pueden luego cambiarse por dinero de verdad? Es la pescadilla que se muerde la cola y el colmo de la ludopatía, todo a la vez.