Cuando algún chino me preguntaba qué iba a hacer por Año Nuevo Chino y yo le contestaba que ir a Xiamen, su respuesta siempre era la misma: ¡Gulangyu! Yo no conocía este sitio antes de ir a Xiamen pero parece ser que es famosísimo entre los chinos.
Gulangyu es una islita entre la isla de Xiamen y tierra firme. Está muy cerca de Xiamen, se tarda menos de cinco minutos en ferry. El aspecto de la taquilla donde se compraban los billetes para el ferry era tal que así:
Hace 100 años, o cualquier otro día que no sea Año Nuevo Chino, Gulangyu debe ser el paraíso. Es bastante pequeña y no hay coches ni edificios altos. La mayoría de las casas son antiguas mansiones. Gulangyu tiene pinta de lugar de retiro de extranjeros hace 150 años.
Al ser un sitio de costa es típico comer marisco (tanto en Gulangyu como en Xiamen), pero la verdad es que el marisco chino no está bueno. Sabe a plástico.
¿Y qué se hace en Gulangyu? Pues básicamente pasear, ya que no hay otro medio de transporte aparte del coche de San Fernando. Bueno, hay unos cochecitos eléctricos como los de golf, pero piden la friolera de 30 yuanes por persona. También se pueden probar todas las frutas y snacks que venden por la calle: jackfruit, fruta de la pasión, peras de cera, esa cosa verde que no sé si era un dátil verde o qué... También hay un té con leche que está buenísimo, 20 yuanes el vaso pero totalmente merecidos. Tenía pasas y almendras!
En Gulangyu había sitios petados de gente...
... y rincones solitarios.
Uno de los puntos de interés de la isla es un peñasco desde el que hay buenas vistas. La entrada vale 60 yuanes pero bueno, ya estamos acostumbrados a estos atracos a mano armada y, como digo, el paisaje está bien.
También hay un museo de pianos, pero ahí ya no fuimos. Parece que es una isla muy musical, había un conservatorio y todo.
Fuimos dos días a Gulangyu y exploramos la isla de norte a sur.
Gulangyu es una islita entre la isla de Xiamen y tierra firme. Está muy cerca de Xiamen, se tarda menos de cinco minutos en ferry. El aspecto de la taquilla donde se compraban los billetes para el ferry era tal que así:
Menos mal que la cola iba rápida. |
Gulangyu desde el paseo marítimo de Xiamen. |
Hace 100 años, o cualquier otro día que no sea Año Nuevo Chino, Gulangyu debe ser el paraíso. Es bastante pequeña y no hay coches ni edificios altos. La mayoría de las casas son antiguas mansiones. Gulangyu tiene pinta de lugar de retiro de extranjeros hace 150 años.
¿Nos compramos una casita? |
Había muchas casas que parecían abandonadas, discutimos la idea de comprar una y montar un hotelito. |
Al ser un sitio de costa es típico comer marisco (tanto en Gulangyu como en Xiamen), pero la verdad es que el marisco chino no está bueno. Sabe a plástico.
La famosa conchapolla. Es que hasta tiene un agujerito en la punta! |
¿Y qué se hace en Gulangyu? Pues básicamente pasear, ya que no hay otro medio de transporte aparte del coche de San Fernando. Bueno, hay unos cochecitos eléctricos como los de golf, pero piden la friolera de 30 yuanes por persona. También se pueden probar todas las frutas y snacks que venden por la calle: jackfruit, fruta de la pasión, peras de cera, esa cosa verde que no sé si era un dátil verde o qué... También hay un té con leche que está buenísimo, 20 yuanes el vaso pero totalmente merecidos. Tenía pasas y almendras!
En Gulangyu había sitios petados de gente...
... y rincones solitarios.
Uno de los puntos de interés de la isla es un peñasco desde el que hay buenas vistas. La entrada vale 60 yuanes pero bueno, ya estamos acostumbrados a estos atracos a mano armada y, como digo, el paisaje está bien.
También hay un museo de pianos, pero ahí ya no fuimos. Parece que es una isla muy musical, había un conservatorio y todo.
Fuimos dos días a Gulangyu y exploramos la isla de norte a sur.